viernes, 28 de noviembre de 2014

"UN PÁJARO POSADO EN LA RAMA MAS DÉBIL" de Luis Luna (Madrid-España)











Un pájaro posado en la rama más débil
sobre la quebradiza nieve del deshielo A Juan Carlos Mestre
aguarda su caída.
El pájaro concede certidumbre.
El árbol crece adentro.


Luis Luna

"EL OTRO LADO" de Carmen Castejón Cabeceira (Pontevedra-España)





                                                                                   Y tú ¿de que  lado de mi cuerpo estabas , alma
                                                                                  que no me socorrías?
                                                                                                                                         J.A Valente






No estamos preparados.

La muerte nos acecha

tras un grito alegórico al rencor.

La transgresión se inflama

y no dejas de ser

un cuerpo vulnerable.

Pero no te previenes

porque tu sino es otro.

Lo que te está esperando es la sorpresa:

El quiste que te mira

desde tu lado oblícuo.

en la guía del ocio , un telegrama;

despertarte en “fin de año” bajo un tráiler

e, inexplicablemente,

comer las uvas monitorizado.

¿Qué se persigue ahora tras los dientes?

El techo se desploma con nuevas decepciones.

La lengua se somete a nuestra rabia

y pierde su humedad

porque ya está en los ojos.

No estamos preparados.

Un funesto temblor

derriba nuestra casa.

la lluvia persistente nos desborda,

y el miedo busca su final fantástico.

Mañana viajaremos en un tren

tal vez el viento arrastre los encuentros.

La duda no es lugar para quedarse.



(c) Carmen Castejón Cabeceira



(de la antología “Tejedores de Palabras” As.Prometeo)


jueves, 27 de noviembre de 2014

"NO ME PREGUNTEN POR LA FLOR" de Aníbal Colón De la Vega (Puerto Rico)






Mi corazón es terreno baldío
y estéril paramera.
No me pregunten por la flor
rojiza de la hierbabuena,
ni por su carne perfumada.
Huyó con el rocío…
Todo se fue tras el amor.
Aquí dentro no crece nada.
Ni siquiera la yerba mala
que germina en las calderas;
y menos aún la vid del amigo
y los trigales de un poema.


Aníbal Colón De la Vega

"CIUDAD IRREAL 2ª PARTE" de Ana Rosa Bustamante (Chile)







En una casa de vidrio se desnudó  en la hora oscura,   que nadie la mirara
con ojos lascivos, pero la plaza atestada
y los genitales se exhibían como copas radiantes
y el cabello le caía por los hombros
sutil
como pelusas.



porque la muñeca gritó como una recia flor
sin agua.
Porque el rugido animal no calló.

Porque  lamenté  no reunirnos a hablar,
Porque si la decisión no es nuestra
la mina no dejará el basalto  a la vista. 


Ana Rosa Bustamante

miércoles, 26 de noviembre de 2014

"ENSAYO EN CADA PÁJARO MI VUELO, APUNTES DE ORNITOLOGÍA I" de Luis Luna (Madrid-España)




 
A mi esposa. A mis hijas


Para los despojados


Llegaste con las manos vacías,
Y regresarás con las manos vacías.
Bhagavad Gita



Ensayo en cada pájaro mi vuelo
y mi caída
mi sazón y mi agraz en cada fruto
mi memoria en la nieve.
He cifrado mi nombre en el paisaje.

Luis Luna

(Mirar pájaros) 

"CIUDAD IRREAL 1ª Parte " de Ana Rosa Bustamante M. (Chile)






Ciudad Irreal
bajo la parda niebla de un mediodía de invierno

Eliot


¿Qué hora es?  ¿de qué año?, que llueve en el frío. Y mis pantalones no se secan.  Saldré a comprar los comestibles  para la cena.  Cocinaré el aroma familiar para impregnar paredes, para que el suelo haga borbotear el  agua de las ollas.
Y bajo la lluvia me amilano, los supermercados abren sus puertas mecánicas
y no entro  por temor a las cajas atestadas.
Me salpica un auto el agua de un charco, los autobuses avanzan,
la gente cruza mirándose, dándose una sonrisa,  una seña y una voz de alarma, o un saludo.
Cae el agua con sus estados anímicos, y la ciudad irreal retuerce su rutina en mi escritorio junto a los lápices,  las cascarillas de naranja en mi té llegan a mi nariz, y estoy sola con las palabras y la imaginación. 

Las calaminas golpetean el techo bajo el leve sol y tus pies se afirman a sus venas palpitantes,
merodeas por la casa,  la paz de mis oídos dibujan los fantasmas y no me dejan dormir,
no quisimos construir colosos
y así pude besarte de cerca. 

Tu piel y tu tos sobre granitos deslizándose, huelo tu perfume que me dejas en mi blusa, no sabemos convivir, destilar  rancios jugos impuestos por la tradición, dos menos que se amarran y llevan alas a ras de la vida.

Una figura negra en el fondo de un abra verdísimo  en la niebla que casi no se ve, no sé si quedarme aquí,  sonríe a las estrellas  que aparecen entremedio de ramas, una jeringa hiere, temores en la nada, dibujos en relieve que lloran,  pero esperaremos para sanar en las dislocadas estelas por el sendero y la esponja que nos da la sabiduría que apenas logramos  obtener para dejarnos.
Disipan los brillantes cerebros en el humo caliente de los ojos, todo se ve redondo como el mundo, la ventana se desarma con los vientos tormentosos. Penden los techos y ellos mueren encerrados olvidados como un pan de ayer sobre el edredón guardado de verano.

Hay un embrujo que me deja quedarme, mis uñas se prenden a mi carne, mi carne no remedia nada con dejarse llevar por el tiempo, los portales son sagrados por eso me detengo y mi cabeza la pongo en el  escaño para que tú la toques. Redime, por favor, con tu presencia pura mi desolación.  Hay luces en medio de la noche que no encienden con el zumbido de los durmientes. El desmán comienza  luego, los transeúntes se persignan y siguen de prisa a sus casas, brilla la plata de las veredas en invierno.

En la vía frenética de los desempleados, las excusas  no tienen música  de fondo, nadie quiere dejar los gestos en la retina de los que miran, son los que gozan del juego, son ganadores, no tiene disculpa el peatón solitario, no por uno se detendrán en el paso de cebra.  La fiesta es grande  como un carnaval de corderos.

Dispara al sol te quiero a oscuras, dispara al sol y en esa  luz se medirá el tiempo de la tierra al sol en un caballo de carreras  que deserta para beber. Y nos quedamos viéndonos mientras el hombre se  sumerge como cada día en su rutina.  No intentes ser humilde, la cancha está inundada, los niños juegan patean balones llenos de polvo y son llamados a cenar por sus madres desgreñadas y la gritadera enerva la velada en la carpa soleada del barrio.  La desteñida  capa de torero me desalienta, pero la necesidad de rondar la mesa el fuego de leña apaga la murmuración.


Los muchachos reparan el automóvil,  suena la huracanada sensación de violencia en la calle, se zafan de las flores,  el bobalicón es golpeado y echado en la pared donde queda aturdido, rehúsa atención médica, su sonrisa da náuseas, su nariz aletea en el cuadro, hay un tufo dulce sanguinolento en el aire, y todos arrancamos, alejarnos lo máximo para no estar comprometidos, como un gusano en la cortadora.



Ana Rosa Bustamante

"CONTIGO, SIEMPRE" de Aníbal Colón De la Vega (Puerto Rico)








Aliviado durante la vida,
temporalmente. 
Curado definitivamente
con la salida.
Pero siempre contigo, Potente.
En la salud frágil de los días,
la sanación raigal de la muerte
me persigue y conmigo camina;
mas la subsumo contigo, siempre.
Tanto en favilas,
cuanto en la mente.

Aníbal Colón De la Vega

martes, 25 de noviembre de 2014

"PEDAGOGÍA DE LA LLAMA" de Luís Luna (Madrid-España)







Te sorprende el calor, la incertidumbre de la llama, el lenguaje del humo. La lumbre te propone/aprendizajes/que luego no se olvidan. El diálogo tenso del frío y la penumbra con los cuerpos cercanos a la luz, impelidos a ella como el pájaro al canto. A ella convocados no por la fuerza de la necesidad ni la costumbre sino por la belleza. Y la belleza también posee lo oscuro, lo que queda/escrito de algún modo/ en la ceniza. 


Luís Luna

¿COMO PODRÍAMOS RECURRIR A LA CAJA DE PANDORA? de Edna Aponte (México)






¿Cómo llegar a la caja de los recuerdos sin atarnos?
Allí todo resuena, retumba.
Cómo
respirar
mecerse ante el telúrico temblor de la memoria
luego soltar al viento la densidad de lo que fue
al viento
viento
vuela
la cicatriz se disuelve al viento
la visión gota a gota renueva
esculpe
refugia
llega
vive sin la cicatriz punzante
el gozo del olvido.

Edna Aponte
 

lunes, 24 de noviembre de 2014

"PLEGARIA ENTRE LA NIEBLA" de Esther González Sánchez (Vigo-España)





Amor que así me mueres
en este inmenso páramo
de místico infortunio:
 mi alma es el silencio
el pálido reposo
pupila de buscarte,
y en el espacio urgente de quererte
el refugio de amar hasta el abismo.

Mi costumbre  de sol,
mi tránsito amoroso:
si aún bebieras en río de mis labios,
si acaso como a mi  te tiemblan horas
que fueron de ternura
en tardes de cerezas,
di en manos de qué dios o en qué condena
bajaron al desnudo nuestras horas,
que a veces ya no sé
donde encontrarte
ni en qué lugar pedirte
de la sombra enlutada,
e igual que se regala
el búcaro de arcilla
al molde soberano de la rosa,
yo me regalo al arpa de tu sombra
para sentirme aún,
sentada en tus rodillas.

©Esther González Sánchez

"PERFUME ABEDUL" de Carlos Román Ramírez (Puerto Rico)



             
                                       

                                                                      

me detuvo rumbo al olvido, aura tardía, hálito,

aliento, soplo, paréntesis otoñal no presentido.

Ella, cenizas de amor traía en singular vuelo

sin alas ni trinos y yo, desojando ayeres, rueca

de pasos cansados hilando caminos.

Le dije “prosigo” y brotó de su fontana

un indeleble “quédate”, “quédate”

con atenuada voz de último latido

como un gemido, como una espuma,

como un vahaje, como un suspiro……

y fue mi silencio un derroche de voz estremecida

al comprender que a su musitar presté mi oído

de interior albedrío pesando destinos.

Tal vez, sólo tal vez olvide que iba al olvido

y le abra mis brazos de hoguera extinguida

un domingo triste como todos los míos

y la garúa monótona de mis sentidos procree

ríos diminutos para su íntimo bogar fatigado

y sea yo el puerto de su viaje postrero   

o el nido de gorriones heridos…… perfume abedul……

acaso no es tarde para deshilar el olvido.



               enero 2014

              Carlos Román Ramírez

viernes, 21 de noviembre de 2014

"Al PASAR" de Ángel Collado Ruíz (México)







Clavo diez plumas a este falso escritorio

observo pasar la vida

voy tras ella

me envuelve

Indago en el niño que pasa

las calles de una infancia sesentera

atado a una isla combustible

empedernida de cosignas

Retozo en la tierra

me acuesto a escucharla

ponen precio

los mercaderes

a las escamas de un pez de oro

Me despierta el estruendo de bombas

por una camino de playas 

se enfrentan los contrarios

Cortan mis dedos las hojas

que un niño dibuja desde la otra orilla

Vuelvo a mis plumas olvidadas

patas de grulla inquieta

He pasado del trance al abismo 

me incorporo a la tarea. 

Ángel Collado Ruíz 

(Del libro maradentro, presentado el pasado Mayo)

"LA MÁSCARA" de Aníbal Colón de la Vega (Puerto Rico)






Ay de aquel que no sepa llevar su máscara,
sea mendigo o monarca.
Y guay de quien en el carnaval su rostro
pierda y lo trueque por otro.
Desgraciado el que se burle de la humana
comedia y no sienta lástima.
Infelice aquel que malogre su turno
en el teatro del mundo.
Ay de aquel que perezca entre candilejas,
y luego busque una vela.

Aníbal Colón De La Vega

jueves, 20 de noviembre de 2014

"RÚBRICA" de Isabel Rezmo (úbeda-Jaén-España)






Las esquinas hablan una teoría en la sangre.  Son como las efemérides, doblegan los nombres como radiales en las axilas. Caminan desde lo alto del hombro hasta el dedo de Dios de la coherencia.
El calor es un punto en el costado de las acequias. Irreverente.
Así me encuentro en las letras.
Ayer miré los cuadros de antaño que movían pausadamente el crisol de sus destellos.
Y me contoneo  tranquilamente al hormigueo de los zapatos, en las aceras.
Voy a consumir la raya de las cervezas, y la prontitud de los estiletes.



Isabel Rezmo