A Héctor Palacios Ruiz,
espejo
en otra dimensión.
A
Gisela.
El gallo es relámpago en la madrugada,
se escucha el canto del arriero
asnos arriba con las barricas de agua.
No busco la Poesía en las nubes rosadas
ni en el rocío,
sino en la leña del monte
y las bibijaguas,
cuando después de mayo
se hace terrones la arcilla.
En la guardarraya y la cañada,
güijes azules anuncian
entre pañales y el agua del río,
el nacimiento de Héctor,
ungido con la luz egea,
en el bautismo de un trópico lejano.
Teresita Herrera Muiña
Hermoso poema que nos recuerda, a la hora de buscar inspiración, la Naturaleza, con toda su terrible hermosura, es un motivo impagable.
ResponderEliminarFelicitaciones a Teresita Herrera, y un abrazo desde Chile.