Me voy, mas no del
todo.
Me voy como la luz que sale a medianoche por tu puerta:
algo se va de ti y algo permanece,
algo de mi se ausenta y no se va del todo pues estuve en tu piel,
en tu mirada,
en la flor incendiaria de tus piernas...
Me salgo de tus labios y
sin embargo, te dejo cada beso,
cada aliento, cada verbo de luna,
cada ventana hacia la noche abierta.
Me quedo en el perfume de tu almohada,
en el sabor de hoja de tu boca, en el renuevo
de tus pétalos, en toda la tibieza
de tus manos, como cuando dibujas
universos azules, caracolas marinas,
soles de otras galaxias y tristezas,
de esas tristezas tuyas que giran como el aire,
como la luz callada que sale de tu puerta.
Hasta siempre, mi amor, sea hasta siempre.....
(c) José Manuel Solá / 1 de diciembre de 2014
.
Me voy como la luz que sale a medianoche por tu puerta:
algo se va de ti y algo permanece,
algo de mi se ausenta y no se va del todo pues estuve en tu piel,
en tu mirada,
en la flor incendiaria de tus piernas...
Me salgo de tus labios y
sin embargo, te dejo cada beso,
cada aliento, cada verbo de luna,
cada ventana hacia la noche abierta.
Me quedo en el perfume de tu almohada,
en el sabor de hoja de tu boca, en el renuevo
de tus pétalos, en toda la tibieza
de tus manos, como cuando dibujas
universos azules, caracolas marinas,
soles de otras galaxias y tristezas,
de esas tristezas tuyas que giran como el aire,
como la luz callada que sale de tu puerta.
Hasta siempre, mi amor, sea hasta siempre.....
(c) José Manuel Solá / 1 de diciembre de 2014
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