Miro
tus aguas serenas, tranquilas
parecen
un limpio y pulido espejo
Reflejo
puro de tantas almas.
Ramas
de árbol que coquetas asoman,
porque
también ellas se miran.
A
trozos tus aguas oscuras se aclaran,
como
los pensamientos de aquellos que aman.
De
aquellos que siguen
en dura
lucha consigo mismo
sin
saber a dónde mirar todavía.
A lo
lejos veo que un ave llega
buscando
el nido, o quizás su pareja
Es
fácil, estamos en primavera
Tus
aguas tranquilas, serenas
Limpias
ahora… después de tanta lluvia
ahora
que nadie pisa removiendo
el
fondo donde se concentra
a veces
toda la ira.
Como
esas almas que siguen en dura lucha
toda una vida.
Higorca Gómez Carrasco
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